Salvados por niños

🗓️3 de agosto de 2023 |

Un 24 de mayo, se me cruzó por inspiración hacer este texto para comentar una sorprendente visión que vengo teniendo al trabajar durante el horario del primario en mi Ex colegio. Es algo que se vino dando por continuidad y no solo en este año, sino desde hace ya varios años. 

Puedo decir que la primera imagen que más me impacto, fue la de ver a los niños en la misa de su Primera Comunión, al cual pude asistir Gracias a Dios por formar parte del coro en el año 2022. Es difícil explicar la gran devoción que se vive dentro de aquella Misa, acompañado de una Homilía espectacular del Padre Guillermo Varela Oro. Realmente existía en aquellos, una inocencia, un corazón, una alegría, una sencillez… que cautiva, cautivan al alma. Trajo al recuerdo mi Primera Comunión… La cual en su momento fue muy especial para mi, como para cualquier otro niño, pero a medida que me fui haciendo más grande, poca importancia y constancia le dí. Tanto que, cuando trataba de recordar, son pocas las imágenes y sensaciones que se me venían al encuentro, e incluso pasando los 18 años me percaté de que día la había hecho. Que horror; que tanta mundanidad se me cruzó por la cabeza. Entonces entendí que asistir a una misa tan especial como la de las comuniones, son una renovación de aquella primera vez. Pude volver a hacer presente en el corazón imaginando los rostros de estos niños, como si fuera el mío. Todo gracias a ellos, que no paraban de vivir tan intensamente cada momento de la Celebración, con su trajecito. Me quedé entre la espada y la pared tomando una actitud de firmeza en la participación de las comuniones. 

Cómo así también pude vivenciar, en un gran número de familias que participaban, una especie de acto protocolar donde el pequeño hace un trámite el cual luego queda guardado en el cajón de “bonitos momentos”. Nada puedo juzgarles a ellos por que yo también pasé por este envejecimiento del alma. Y si, esa fue la conclusión: “El envejecimiento del alma”, que no viene asignado por edades sino por una actitud constante de vivir plenamente cada momento, tal como aquellos niños. Son tantas las cosas a aprender de ellos. Ahí vi el triunfo de la sencillez ante, voy a llamarle “intelectualidad”. 

Ese fue el primer momento, en mucho tiempo, en el que pude volver a notar esta manera de evangelizar tan sencilla y natural, característica del niño.

En 2023, y ya trabajando en la fotocopiadora durante los horarios del primario, lo que más me impactaron además de sus monadas en los recreos, fueron los actos. En todos ellos se vive un tinte muy diferente al del secundario. Es lo que siempre se me enseñó, al niño le puede todo lo que sea vistoso. Asi mismo eran los actos. Siempre hay escenografía, siempre algunito anda con su disfraz deslumbrando en su actuación. Siempre hay signos que les ayuda a entender mucho mejor a ellos. Son todos actos muy bien preparados. Y desde ya que la vivencia de estos son completamente distintas a la de un acto de secundaria. Ambas divisiones y sus modalidades de encarar una fecha importantes, son necesarias, pero que buena dosis las del primario. Te quedas con ganas de seguir viendolos. 

Más me erizo la piel, cuando en el acto del 25 de mayo, en el momento del Himno Nacional Argentino, cada uno de los chicos cantaban con una potencia que dejaba humillados a todos los mayores que los veían, incluyendome. Fue emocionante. Que dedicación, que gran sentimiento patriótico. Daban un testimonio muy fuerte y natural, al mismo tiempo. Ninguna Maestra les pidió en el momento que canten así (Aun que evidentemente, a la hora de la enseñanza si influyen). Luego me tocó llegarme un rato por el acto del secundario y… no hay con que darle. Sentí mucha pobreza. Pero pareciera que es por el ambiente, la formalización del acto, nose… Porque cuando la Argentina juega, el himno (Por parte de todos) se siente hasta el Cielo. No vengo a resolver eso, sino a dar testimonio de la gran diferencia del alma del niño, con la del adolescente, e incluso del mayor. Fue en ese acto de la primaria donde dije en mi mente ”Los niños salvarán al mundo”. Más no olvido las Palabras de Jesús: “Volverse como niños”, palabras que en la teoría estan muy bien estudiadas, pero en la práctica se envejecen. Y cuando se visita la realidad, todos los pelos se ponen de punta. No hay duda, seremos “salvados por niños”. Gracias  por sus testimonios. Seguiré escribiendo sobre ustedes.

Salvados por niños

Testimonios naturalmente fuertes
cargados con ímpetu de demencia
Demencia portada de imaginación
Imaginación marcada por esencia
semilla de la que brota la ilusión
Un futuro noble habitado por gigantes

Por gigante no llamamos al cuerpo
sino al alma robusta de Humildad
lo llamamos sencillez inocente
remedio implacable para el tuerto
quien se envejece en mundanidad
por su mirada amargada del presente

Pocos ven al gigante escondido
pocos encuentran el tesoro que reluce
Hay más por admirar que solo ternura
aún enseñan la verdad de lo perdido
viviendo intensamente lo que se cruce
con sensación de disposición pura

Que poco concebido pero necesario
es ver un adulto, que del niño aprenda
y que sea revivido en corazón, sanados
Héroes extraordinarios de lo ordinario
Con más hazaña de las que parece
en ellos está la clave para ser salvados

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